martes, 24 de xullo de 2012

Por un Correos Público, Social y Universal!!!!




Esperamos que los jerifaltes del Centro Directivo de Correos sepan que tienen que contar para el futuro con un colectivo de trabajador@s vivo y lo suficientemente sensibilizado para saber contestarles con toda la fuerza que saben que tienen ( y es mucha!!! lo de Vigo fué un aviso) que, junto con la creatividad y la audacia pueden dar al traste con sus codiciosos y maquiavélicos planes de romper una empresa pública que todos sus trabajadores queremos que siga existiendo, puesto que es nuestra propia vida laboral la que está implicada en un cien por cien en esta existencia de Correos como servicio publico social y universal.

Más abajo tenéis un buen articulo del FARO DE VIGO en el que podéis entresacar la respuesta de la ciudadanía, y lo costoso que les fué a todos la gente afectada tener que sufrir en sus propias economías la pasada huelga postal.

Eso nos dice que la propia vida de una ciudad  -como la de Vigo- gira y depende en un alto grado de CORREOS.

Eso nos dice que esa vida ciudadana se alterará gravemente si CORREOS  prescinde de dar el servicio publico que vino dando desde hace más de cien años.

Eso nos dice que la ciudadanía NO VA A PERMITIR que CORREOS desaparezca.

LA CIUDADANÍA LO QUIEREN COMO EN VERDAD ES:

UN SERVICIO PÚBLICO!!!!

Y así lo seguirá siendo.

No lo dice la CGT. Lo dicen todos sus trabajadores y su propia red de afectados.

Afectados por lo que por fines de sacarle negocio , pueden CUATRO SINVERGUENZAS alterar gravemente las costumbres sociales y económicas de todo un pueblo.

Así que, señores:  sepan que cuando están negociando la venta -a las calladas -  de Correos con el Deusthe Post, están actuando de una manera INNOBLE y DELICTIVA.

Aquí no se trata ya de "vender Correos"... aquí se está tratando de QUITARLE A LA CIUDADANÍA ALGO QUE SIEMPRE FUÉ SUYO!!


Vayamos ahora a ver el articulo de Carlos Prego. El Faro de Vigo:




Los buzones de la ciudad recuperaron ayer su imagen habitual. O casi. Tras siete semanas de huelga los carteros del centro vuelven al trabajo con el reto ingente de repartir los cientos de miles de envíos acumulados en sus oficinas centrales. Correos se marca como objetivo "normalizar" la situación en ocho días y con ese fin ha doblado el turno y contratado a 26 refuerzos. Los sindicatos, que resaltan el "caos" que se vivió ayer en la central de la Alameda, ven ese plazo inalcanzable y lo eleven a las tres semanas. Domicilios y empresas empiezan a recibir a cuenta gotas su correspondencia atrasada.

CARLOS PREGO Las estanterías de Fusión, una agencia dedicada a la publicidad en el corazón de Marqués de Valladares, presentaban ayer una estampa insólita. Bajo la prensa del día abultaba una pila con decenas de revistas atrasadas. "Nos las trajeron todas por la mañana", explica su encargada, Manuela Soto. El envío se resta a los cientos de miles –560.000 según Correos, más de un millón para los sindicatos– que se han ido acumulando en las dependencias de la Alameda desde que el día 4 de junio los carteros del centro iniciaron una huelga contra los recortes de personal. Tras rubricar el viernes un acuerdo, ayer las oficinas del Areal retomaron la actividad con un reto claro e ingente: "normalizar" el servicio de reparto.
Para lograrlo cuanto antes Correos redobla esfuerzos. Además del horario habitual, de 7.30 a 15.00 horas, la empresa activa un turno extra, de 13.00 a 20.30, y dispone desde ayer de 23 refuerzos de reparto a pie y dos en moto. La nómina total ascenderá así, mientras se da salida a los miles de envíos atrasados, a 67 carteros, incluidos los 44 de plantilla. Sobre los criterios de reparto, Correos avanza que "priorizará" los paquetes que acumulen una mayor demora. El trabajo nuevo se verá dinamizado a mayores con el apoyo del Centro de Tratamiento Automatizado de Santiago, del que ya sale clasificada por calles el 80% de las misivas. "Con las actuaciones previstas y que se están ejecutando consideramos que la situación estará normalizada en ocho días", zanja la dirección.
La cifra es demasiado optimista para los sindicatos. Antonio García, de CIG, eleva el plazo a tres semanas y Suso Lijo, de CGT, coincide en que difícilmente podrá bajar de 14 días. "Dependerá de la cantidad de cartas que entren ahora y de cómo responda el personal de refuerzo que se ha contratado", aporta Lijo. La plantilla ve en cualquier caso "complicado" cumplir con la marca de 60.000 envíos por día que sería necesario cumplir para despachar las 560.000 cartas reconocidas por Correos antes del seis de agosto. "Es un tema de organización pero creo que no se podrá hacer en ese plazo", abunda García. A modo de ejemplo recuerda el espíritu "caótico" que se vivió ayer en las dependencias de la Alameda. "Los carteros acostumbran empezar su reparto a las 10.00 horas, pero por la mañana todavía no estaba distribuido el trabajo, con lo que se retrasó hasta las 12.00". La propia compañía postal espera "alcanzar el mayor nivel de eficacia a partir de mañana [por hoy]", si bien mantiene que "la actividad se llevó a cabo sin ninguna incidencia".
Unos metros insalvables
La "vuelta a la normalidad" causó expectación entre los negocios de la zona. Durante cerca de 50 días la mayoría vio cómo se quedaban retenidas en las dependencias de Correos sus órdenes de pago, recibos... o incluso mercancía. "Me enviaron dos paquetes desde Málaga con bisutería y bolsos pero todavía no he podido recogerlos", relata Montse Rodríguez tras el mostrador de Toque´s Complementos. "Me quedo sin venderlo y ahora todavía tengo que decidir si me quedo los artículos o los mando de vuelta". Otros autónomos en situación parecida optaron a las pocas semanas de huelga por "buscarse la vida" con empresas de paquetería privada. Ángel Otero, responsable de la agencia de viajes Abramar y que dio la voz de alarma a finales de junio al denunciar que tenía 200.000 euros sin cobrar en cartas retenidas, lamenta que "gastamos dinero sin necesidad". "Llamamos a los clientes para cancelar órdenes de pago y volver a emitirlas, usamos repartidos privados, optamos por enviar nuestras cartas a Traviesas o Balaídos...", relata.
A unos metros de su negocio, Vanesa Crespo, de la papelería Yacaram, reconoce que "en junio no cobró nadie". "El atraso es bestial y nosotros tenemos incluso paquetes retenidos", comenta. En general su indignación es compartida en los negocios de Marqués de Valladares y el entorno del Areal. Rosi Prol, de Vigo Foto, no oculta la "rabia" de saber que "las cartas están ahí al lado y sin embargo no puedes recogerlas". A ello se suma las dificultades para hacer la caja del mes y cumplir con los libros de cuentas cuando los recibos no llegan. "Al hacer la contabilidad nos faltaban facturas", señala Manuela Soto. Con una experiencia similar, Belén García, empleada en el Hotel AC Palacio, confiesa que "hay pagarés que no sabes si llegaron o no". "Ahora me voy de vacaciones, pero sé que cuando vuelta voy a tener un montón de trabajo esperándome en el hotel", bromea.
Empresas del Puerto exigen ser "prioritarias" en el reparto
Tras siete semanas de huelga las empresas del Puerto reconocen que el acuerdo entre plantilla y empresa llega "cuando estábamos ya al borde". Por todo ello el presidente de la Federación de Usuarios del Puerto de Vigo, Fernando Fernández Ibáñez, urge a la dirección postal a que "priorice" a los negocios en la entrega de los envíos atrasados. "Si a los problemas de la crisis le sumamos esta dificultad añadida la situación llega al colmo". Horas después de que se reactivase la entrega de correspondencia, Fernández Ibáñez reconocía sin embargo "no haber notado" aún el fin de la huelga.
Marisol Landriz, directora-gerente de la Asociación de Comercializadores de Pescado de Vigo (Acopevi), coincide al resaltar el momento "delicado" en que se rubricó el acuerdo entre Correos y plantilla. "Hemos tenido que buscar alternativas, como la mensajería privada, pero eso nos ha supuesto un esfuerzo adicional", anota Landriz antes de reconocer que Acopevi todavía no se ha planteado exigir responsabilidades a Correos por el perjuicio que se les ocasionó. "Es algo que todavía no hemos valorado ni descartado".
El uso del reparto postal para recibir o enviar talones y pagarés afectó "seriamente" a las empresas de O Berbés, que vieron como se quedaban bloqueados millones de euros. Esa situación llevó al presidente de la Cooperativa de Armadores, Javier Touza, a alertar sobre el "perjuicio económico importante" que se les estaba ocasionando.
Por otra parte, la Xunta publicó ayer en el DOG el listado con las notificaciones que le llegaron devueltas por el servicio de Correos.


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Voceiro da CGT Correos A Coruña

Voceiro da CGT Correos A Coruña
Buzón rebelde