Querido compañero:
Recibimos tu carta con aburrimiento, otra declaración de intenciones de otro Presidente de Correos.
De ti no esperamos nada nuevo ni para mejorar nuestras condiciones de trabajo ni para mejorar y potenciar el servicio publico que consecuentemente no puede dejar de dar Correos , aunque por la linea estratégica de tu carta me parece que vais en sentido opuesto.
Nos estás pidiendo unas cosas , pero suponemos que a cambio de algo, quizás pidiéndonos confianza plena y dedicación hacia el NUEVO RUMBO de nuestra empresa ( o lo que nos dejéis de ella) , siendo todo lo demás potencialmente desechable.
Independientemente de todo eso, cuando un Presidente se dirige a sus subordinados , siempre se acompaña de una serie de gestos para hacer creíble su mensaje.
La realidad es diferente; en A Coruña, la CGT y yo como su cabeza visible hace años estamos siendo vigilados, calumniados, ninguneados y despreciados, y eso al no tener visos de cambiar, nos define lo que realmente pretendéis.
Unido al secuestro de nuestro local sindical de la CTA de Santiago (junto con toda la documentación confidencial allí existente ), por el mero hecho de tenerlo abierto a los compañeros las 24 horas del día ; el control hacia mi persona como si fuera un delincuente, el bloqueo de mi código personal de la fotocopiadora de uso sindical ( suponemos por la “gran cantidad de fotocopias que suelo hacer”), la nula información de la contratación o de los partes de accidentes de trabajo o el simple reglamento del Comité Provincial de Salud que como delegado de prevención tengo que tener, la calumnia repetida desde la Jefatura ( utilizar el local sindical de la CTA como vivienda), la negación de la información más elemental ( desde el número actualizado de oficinas provinciales de Correos , con sus direcciones, teléfonos, etc, hasta el suministro de material de oficina solicitado en cuanto a sobres, etc,) el control de mi propia liberación mensual, cambios de horarios en asambleas a ultima hora, mails de RRLL de Zona a las oficinas lucenses previniendo de nuestra presencia e incidiendo “que se les llamara si hubiera algún problema provocado por nosotros”, la prohibición a los jefes de oficina de darnos datos sobre incidencia de la pasada huelga general, el seguimiento a nuestros afiliados con aperturas de expedientes o despidos, la provocación física hacia mi persona , la negación de atender gente enferma “en su puesto de trabajo”como delegado de prevención, el insulto, el entrometerse en el uso de los tablones sindicales…
Todo ello, querido compañero, no hace más que calificar tu carta como de un simple paripé populista , temiéndonos que no nos vas a dar más información de lo que estáis planeando en secreto en estos últimos meses que esta misiva tuya.
Y te lo digo yo, que además de hablar en nombre del colectivo siempre me he considerado un trabajador de base con mas de 35 años en reparto a pié, que quiere a Correos y que siempre estuvo dando lo mejor que tiene por esta empresa, que siempre recibió de la ciudadanía ese respeto y consideración que gozamos los carteros de Correos por ser buenos y honrados profesionales y coherentes con la finalidad de Correos, que es el Servicio Publico Universal.
Por tanto, antes de pedirme cualquier cosa, señor Presidente de Correos, haz el favor de restituir la dignidad ultrajada a mis compañeros .
Recibe un saludo libertario.
Atentamente
Manolo Camba Gayoso
Sindicato Provincial de Correos de A Coruña de la CGT
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